La diputada federal del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Wendy Briceño, hizo un llamado a las autoridades electorales y judiciales en el estado de Sonora, y también a nivel federal, para atender las denuncias presentadas por violencia política de género en su contra.
En un pronunciamiento virtual, la congresista federal indicó que los pasados 5, 14 y 15 de diciembre, acudió al Instituto Nacional Electoral (NE) y a la Fiscalía General de la República (FGR), a dar cuenta de los hechos que la afectan desde 2019.
"Que se investigue, que se aplique y que se cumpla la ley. Yo ya he hecho lo propio y seré respetuosa en todo momento del debido proceso y respetaré los derechos de los denunciados siempre, aunque ellos no hayan respetado los míos", exigió.
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Detalló que se trata de ataques con la difusión de información falsa en su contra en medios de información locales, principalmente en redes sociales; así como descalificaciones por impulsar la agenda de género.
Agregó que también ha sufrido actos de intimidación, ya que fue seguida por personas y automóviles que incluso se apostaron afuera de su domicilio particular durante algunos días, ello, en el marco de las manifestaciones a las afueras del Congreso de Sonora, con motivo de la aprobación de la llamada "Ley Olimpia".
Indicó que las agresiones se desataron desde octubre de 2019, cuando se distribuyeron volantes apócrifos atribuidos a su persona, con el fin de dañar su imagen y descalificar tanto su trabajo parlamentario, como su persona.
Detalló que entre otros actos en su contra, durante las marchas feministas en Sonora, en marzo pasado, fue calumniada, al ser acusada de haber instigado pintas e irrupciones en edificios públicos en esa entidad.
Atribuyó las agresiones en redes sociales y las publicaciones de algunos colaboradores de plataformas periodísticas, a su trabajo en materia de igualdad de género, el acceso a derechos de las mujeres y la no criminalización de sus libertades.
Por esas causas, dijo, ha sido víctima de misoginia, calumnia, discriminación y descalificación, con el fin de desacreditarla pública, política y personalmente.
Tras señalar que incluso la han acusado de ejercer el "sexismo legislativo", indicó que durante las marchas relativas a la Ley Olimpia, a las afueras del Congreso de Sonora, volvió a ser intimidada y perseguida por personas y vehículos que incluso se presentaron en su domicilio particular.
Recordó que las autoridades electorales en Sonora emitieron medidas cautelares a su favor, con el fin de frenar los ataques en medios de comunicación y redes sociales, lanzados por algunas personas en particular, quienes ya han sido denunciados ante las instancias correspondientes.
Aclaró que sus denuncias se han presentado no contra los medios de comunicación, sino a los colaboradores en específico, que de manera sistemática han difundido mensajes de odio con respecto a ella y su trabajo.
Agregó que desde el pasado de 19 diciembre, una de las personas denunciadas reincidió en los ataques y ha argumentado que ella busca limitar la libertad de expresión.
"No más mujeres que vivan o vivamos violencia en política, así como, en nuestras vidas públicas y privadas. No más violentadores que se escudan en cualquier excusa para pretender socavarnos y humillarnos", demandó.
Al respecto, las diputadas federales de Movimiento Ciudadano (MC), Martha Tagle; Rocío Villarauz, de Morena, Clementina Marta Dekker y Karina Rojo, del Partido del Trabajo (PT); Olga Patricia Sosa, del Partido Encuentro Social (PES), y Cynthia López Castro, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), expresaron su respaldo a la presidenta de la Comisión de Igualdad de Género en San Lázaro.