La modificación del outsourcing en México podría ser motivo de intervención de parte del gobierno de Estados Unidos en caso de que se vean trastocados los intereses de empresas estadounidenses ante la decisión que tome el gobierno mexicano, coincidieron los representantes de los partidos demócrata y republicano en México, Gricha Raether y Larry Rubin respectivamente.
Al participar en el panel Elecciones en Estados Unidos organizado por la Concamin, el representante en México del partido demócrata, Griha Raether fue cuestionado sobre la postura de Joe Biden en caso de que desaparezca el Outsourcing como lo plantea el gobierno de Andrés Manuel López Obrador y el impacto que tendría para las empresas estadounidenses.
Información relacionada: Reforma sobre ‘outsourcing’
Ambos políticos coincidieron en que será peligroso que desaparezca esta figura dado que se trata de una herramienta fundamental para la inversión de las empresas, además que atenta en contra la generación de empleo.
"No hay duda alguna de que es malo para todos que el Outsorcing se prohíba es un movimiento muy peligroso para cualquier país pero siempre y cuando se respeten los lineamientos que ya están establecidos en el Tratado de Libre Comercio y no se atente contra los intereses particulares de las empresas que están en México y que vienen de Estados Unidos; sin embargo en el momento en el que se transgredan esos derechos de las empresas y que de alguna forma las afectan directamente violentando el Tratado de Libre Comercio ahí sí sin duda podría haber algún tipo de intervención", advirtió Gricha.
A su vez, Rubin concidió plenamente en que "es algo muy peligroso el cambiar algo que ya se hace a nivel mundial tenemos que recordar que el Outsorcing no solamente se hace en México sino se hace todos los países del mundo con sus claras excepciones. La realidad es que el Outsorcing es una herramienta vital para las empresas que le da certeza no sólo a la inversión sino también da creación de empleo y creo que atentar contra la creación de empleo es muy peligroso".
Sobre la relación comercial que habrá entre ambas naciones de confirmarse el triunfo del demócrata, Raether aseguró que no habrá modificaciones en el T-MEC, además que no será como en el gobierno de Donald Trump ya que tampoco se prevé imposición de aranceles.
"Lo que no va a suceder son amenazas de aranceles que hasta cierto punto no muestra ese derecho o respeto que debe tener un país socio, amigo o hermano como son Estados Unidos y México, y ahí es donde va a cambiar significativamente la postura de un gobierno demócrata", expuso.
Rubin indicó que de confirmarse el triunfo de Biden, el congreso estadounidense que está controlado por partido republicano, por lo que hay certeza de que no habrá modificaciones al acuerdo comercial entre México, E.U y Canadá ya que se forzará a dar continuidad a la inversión y se protegerá el comercio.
"Podemos estar tranquilos de que se dará continuidad porque el senado no le va a permitir a Joe Biden y a Kamala Harris si ellos fueran los que a partir del 20 de enero gobernaran E.U, que se salgan del carril como muchos demócratas han querido y que se enfoquen en otras prioridades que solamente perjudicaría y más en un 2021 complicado, y no permitirán que busquen salirse de un acuerdo tan importante y tan vital para la economía", señaló.
A su vez, Francisco Cervantes, dirigente de la Concamin destacó la importancia de las tres economías en su conjunto por lo que se buscará mantener una agenda conjunta para no tener iniciativas distintas "que choquen entre sí" para que las empresas puedan seguir transitando en el tema prioritario que es conservar el empleo.