México solo avanzó un punto en el ranking del Índice de Percepción de la Corrupción 2019, al pasar del lugar 138 en 2018, al 130 en 2019 de las 180 naciones evaluadas, obteniendo 29 puntos en una escala donde 0 es mayor percepción y 100 menor percepción de corrupción.
Sin embargo, nuestro país sigue estando en el bloque de los países más corruptos de América Latina y está por debajo de Brasil, El Salvador y Bolivia. Para la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México está en último lugar ocupando el 36 de los 36 países.
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"La calificación de México lo coloca en el último lugar entre los miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), grupo de países que engloba el 80 por ciento del comercio e inversiones mundiales. México está por debajo de otros miembros que provienen de América Latina", señala el instrumento.
De acuerdo al informe, los resultados registran los ajustes a la estrategia anticorrupción federal como la incorporación de la Unidad de Inteligencia Financiera o la entrada en operación de la Fiscalía General de la República con autonomía constitucional.
Luego de los resultados, la titular de la secretaría de la Función Pública, Eréndira Sandoval, aseguró que todo es gracias a la política anticorrupción del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Mediante un comunicado afirmó que todo es producto "de una estrategia que da resultados", además de "sanciones contundentes" a altos funcionarios involucrados en casos como Odebrecht y la denominada Estafa Maestra.