En el marco de su visita por nuestro país, el fiscal general de Estados Unidos, William Barr, analizó con funcionarios del gobierno mexicano varios puntos de la agenda de seguridad bilateral y acordó un programa común para reducir el tráfico de armas, drogas y recursos financieros de las redes de delincuencia transnacional, además de la indagatoria contra Genaro García Luna y el caso de la familia Lebarón.
Por la mañana se reunió con su homólogo mexicano, Alejandro Gertz Manero, con quien dialogó diversos temas, entre los que destacan los avances en las investigaciones contra el secretario de seguridad pública, García Luna, esto de acuerdo a fuentes de la Fiscalía.
Tras casi 40 minutos de reunión, se trasladó a la sede de la secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, donde se reunió con los integrantes del gabinete de seguridad, el canciller, Marcelo Ebrard, y el consejero Jurídico, Julio Scherer.
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Acompañado por el embajador de EEUU en México, Christopher Landau, Barr escuchó los avances en materia de tráfico de armas, a fin de analizar la implementación de operativos empleando medios tecnológicos no intrusivos en puntos clave de la frontera para detener el trasiego de municiones y armamento a nuestro país.
De igual forma, en el encuentro en el que también estuvieron Alfonso Durazo; de Gobernación, Olga Sánchez Cordero; de la Defensa Nacional, Luis Crescencio y de Marina, José Rafael Ojeda, también se dieron a conocer avances en el caso de la masacre de la familia Lebarón.
Al término del encuentro en las instalaciones de la SSyPC, el estadounidense salió en medio de un convoy de ocho camionetas con matrícula diplomática y escoltado por la Policía Federal y por elementos de seguridad pública local, para dirigirse a la embajada de EEUU en nuestro país y de ahí partir de regreso a Washington.