El diputado federal del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), Porfirio Muñoz Ledo, que hasta este jueves 5 de septiembre presidió la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados subrayó que seguirá despachando como integrante de la Legislatura.
No solo eso, ocupará su curul y acudirá a las sesiones cotidianamente, presentará iniciativas y se encargará del proceso de integración y adecuación de los centros de estudio existentes en el recinto, indicó.
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Cuestionado al finalizar la sesión en la que por acuerdo político entre los grupos parlamentarios y sus respectivos partidos, fue electa como nueva presidenta de la Mesa Directiva a la diputada panista Laura Rojas, Muñoz Ledo señaló que no tiene ningún encono personal contra el albiazul, pese a que sus integrantes lo insultaron durante días enteros.
Serio y visiblemente cansado, con un inocultable gesto de incomodidad ocasionado por el desarrollo de las acciones en San Lázaro en los últimos días, dijo que no espera disculpas de quienes lo ofendieron.
No obstante, anunció que procederá contra sus agresores ante el Comité de Ética del recinto.
Respecto a la "mentada de madre" lanzada este miércoles a micrófono abierto, en protesta por los términos en que se procesaron las reformas a la Ley Orgánica del Congreso, el legislador morenista dijo que ese tipo de expresiones muestran sentimientos, en algunas ocasiones muy evidentes.
Su polémica frase, abundó, tuvo que ver con el modo en que se procesaron los cambios a la Ley Orgánica, la cual incluyó artículos transitorios a los que se refirió como "una caricatura" y fueron producto de "cochupos interpartidarios".
Aclaró que dicha manifestación, no le surgió precisamente "de corazón" o "del alma", sino de la "rabia" que el desaseado procedimiento promovido por su propia bancada le causó.
"Uno, uno se expresa en un sentimiento, ustedes juzgan si es merecida o no, pero primero tienen que saber a quién estaba dirigida, a procedimientos que son verdaderamente obsoletos. No, fíjate, las mentadas no son de corazón, son de rabia", admitió.
También reconoció sentir cierto alivio por el hecho de que la "carroza" de la Cámara no se convirtió en "calabaza", como vaticinó la mañana de este jueves 5 de septiembre, al urgir a destrabar el conflicto por la Mesa Directiva.
Insistió en que cual Cenicienta, dejó en el camino de la Mesa Directiva su "zapatilla".
Respecto a si tiene nostalgia por bajar de la Mesa Directiva, fue directo al señalar que no, porque el recinto se ve igual desde todos los ángulos, y en su carrera parlamentaria le ha tocado dirigir, "estar en la burbuja", interpelar e impulsar cambios relevantes.
Su lugar natural, apuntó, es en las curules como un legislador más y sin cargar con el peso de garantizar la unidad en la Cámara y el Congreso.
Cuanto el legislador respondía preguntas de los reporteros, su coordinador, el diputado Mario Delgado se acercó a felicitarlo.
"¡Felicidades, gracias Porfirio! ¡Gracias, eres el Batman de la democracia en México! ¡Gracias, felicidades Porfirio!", le dijo Delgado Carrillo.
"Y tú el Robin, el Robin a veces, el Robin a veces", reviró tajante el aludido.