Integrantes de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA) levantaron el plantón que instalaron en la sede del Senado de la República y lamentaron que el gobierno federal no haya abierto una vía de diálogo con el sector agropecuario del país.
Tras más de 24 horas de bloqueo, los campesinos comenzaron a retirar las lonas y casas de campaña que habían colocado en el perímetro de la Cámara Alta, así como la carpa que montaron sobre la calle de Paris.
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Previo a su retiro Jonathan Rufino, dirigente de la UNTA, destacó que lo que buscan es que los campesinos del país sean escuchados para crear la política de desarrollo que requiere el campo.
Jonathan Rufino rechazó que las organizaciones campesinas sean corruptas y retó al presidente Andrés Manuel López Obrador a que revise las reglas de operación de cada programa de asistencia social para que no meta a todas en la misma canasta.
El día de ayer, el Senado de la República suspendió actividades debido al bloqueo que mantuvo un grupo de campesinos por más de 24 horas.