Los sicarios que perpetraron el ataque contra el bar Caballo Blanco de Coatzacoalcos, Veracruz, con saldo de 28 personas muertas, ingresaron al establecimiento armados con fusiles de asalto y ordenaron a los clientes y empleados que se tiraran al piso.
Aprovecharon que las víctimas estaban sometidas para rociar con gasolina el establecimiento y prenderle fuego, según se desprende del parte informativo del primer respondiente de la policía municipal de Coatzacoalcos, al que este MVS Noticias tuvo acceso.
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Los presuntos miembros del Cártel de Jalisco Nueva Generación, que operan bajo las órdenes del jefe de plaza Ricardo Romero Villegas, “La Loca”, cerraron las puertas para impedir que la gente escapara.
De acuerdo con el reporte de las autoridades, los sicarios llegaron al antro la noche del martes a bordo de un vehículo color gris y de un taxi, los cuales estacionaron frente al bar.
Se distribuyeron de manera estratégica para prevenir la llegada de elementos de la policía municipal y estatal e incluso de la Guardia Nacional.
Cuando el establecimiento comenzó a arder con las personas adentro, lanzaron bombas Molotov y se ubicaron frente a los accesos; cuando alguno de los afectados pretendía escapar, entonces dispararon.
El parte informativo refiere que el primer respondiente elaboró su primer reporte de los hechos a las 00:42 horas; al lugar arribaron elementos de la fuerza civil y de la Guardia Nacional para apoyar a la Fiscalía General de Justicia del estado.
El agente municipal con indicativo "Kari", quien tripulaba la patrulla PA-490, solicitó el apoyo de la corporación para acordonar la zona y resguardar el inmueble a efecto de preservar los indicios que posteriormente fuero recabados por agentes ministeriales.
A las 03:00 horas, la policía local informó que el saldo preliminar hasta entonces era de 25 personas muertas y 13 heridas.
Este parte fue el que tomó como base el gobernador Cuitláhuac García, para rendir un informe de la tragedia al presidente Andrés Manuel López Obrador.
La policía de investigación inició la búsqueda de los sospechosos a través de entrevistas y de las cámaras de video vigilancia del C4 y de particulares.
Además, desplegaron un operativo en coordinación con las fuerzas armadas para localizar a Ricardo Romero Villegas, “La Loca”, a quien el gobernador identificó como principal sospechoso del ataque contra civiles.