El presidente Andrés Manuel López Obrador, adelantó que es probable que esta semana se firme un acuerdo conciliatorio con las empresas que recibieron los contratos para la construcción de los gasoductos en el norte del país, las cuales fueron amagadas con un arbitraje internacional por la Comisión Federal de Electricidad (CFE) a fin de disminuir los costos de las obras.
Explicó que este probable acuerdo con las empresas será posible debido a que una empresa mexicana, de la que se reservó el nombre, "dio el primer paso y aceptó las nuevas condiciones", a fin de no recurrir a un arbitraje internacional.
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Se presume que esta empresa sería el Grupo Carso, cuyo propietario Carlos Slim se reunió con el jefe del Ejecutivo federal hace algunos días en Palacio Nacional.
Debido a ello "las empresas aceptaron el diálogo y la revisión de las condiciones de los contratos, que nosotros hemos considerado excesivos, y mostraron su decisión de llegar a un arreglo para no ir a los tribunales”, adelantó el presidente quien confió en que este acuerdo pueda signarse el próximo jueves a más tardar.
Organismos empresariales mexicanos y representantes del gobierno de Estados Unidos se manifestaron en contra de la decisión de la CFE de suspender los acuerdos con estas empresas advirtiendo, en el caso de las cámaras empresariales, que se pondría en riesgo la estabilidad económica, la confianza de inversionistas e incluso un sinnúmero de empleos.
Por su parte el gobierno de Texas envió una carta al Presidente López Obrador para que permitiera el uso de los gasoductos ya construidos para permitir la exportación del gas natural.