La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) emitió medidas cautelares a las autoridades correspondientes con el fin de evitar la consumación de violaciones a los derechos humanos y la posible irreparabilidad de daños a quienes resultaron afectados cuando personal de la Guardia Nacional y de la Policía Federal, pretendió ingresar a los albergues Exodus Came, en Agua Prieta, Sonora, y Casa del Migrante, en Saltillo, Coahuila, respectivamente, para realizar revisiones del estatus migratorio de las personas que se encontraban allí alojadas y solicitar información sobre ellas.
Asimismo, el organismo condenó el hostigamiento, amenazas y presiones que los agentes federales realizaron contra la labor de las personas defensoras de derechos humanos.
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La CNDH refirió que cualquier acto de hostigamiento, amenaza o presión hacia la labor que realizan los albergues, sus integrantes o directivos debe reprocharse en un momento tan sensible y complejo como el que atraviesa el país en materia migratoria, ya que dichas instalaciones se han constituido en espacio de alojamiento y generosidad hacia las personas y familias.