Obispos integrados a la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), hicieron un llamado a los gobiernos federal y de Chiapas, a implementar un Plan de Emergencia y se otorgue ayuda humanitaria a los migrantes que se encuentran en la frontera sur, quienes deambulan en busca de comida.
A través de un comunicado Rogelio Cabrera López, Presidente, Alfonso Miranda Guardiola, vicepresidente y José Guadalupe Torres Campos, Responsable de la Dimensión Episcopal de Movilidad Humana, así como Jaime Calderon, Obispo de Tapachula, evidenciaron además que ante el flujo de las caravanas de migrantes se han manifestado actitudes de rechazo, indiferencia, xenofobia, discriminación y racismo.
Ante la situación en la frontera sur, anunciaron que han solicitado la acción de la Caritas Nacional para que se articule la ayuda que hay en el país y también han convocado a las diferentes diócesis a que se organicen en un esfuerzo adicional con sus feligreses.
"Nos preocupa la situación de la frontera sur, específicamente lo que vive la ciudad de Tapachula, en Chiapas. El inmenso número de migrantes continentales y extra continentales ha rebasado la ayuda de la Iglesia y la acción del Gobierno. Las instalaciones de la estación migratoria Siglo XXI están sobre saturadas lo cual no permite no permite una atención humanitaria, provocando que los migrantes deambulen por la ciudad buscando ayuda", evidenciaron los Obispos.
Finalmente llamaron la atención sobre el nivel al que ha escalado la crisis humanitaria que se está viviendo en Tapachula, donde aseguran qué hay cientos de migrantes que tienen ya varios días sin comer y que duermen en la calle. Hay niños, ancianos, enfermos y algunas mujeres en la cercanía de las labores de parto que no reciben atención de las autoridades.