A pesar del llamado a la unidad que se hizo en el Consejo Nacional de Seguridad, persistieron las discrepancias entre gobernadores y el gobierno federal.
El gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, acusó al presidente Andrés Manuel López Obrador "politizar" el tema de seguridad y sostuvo que se deben diseñar estrategias de seguridad regionales y definir claramente las metas de los gobiernos locales y la federación, lo que supera asistir a reuniones matutinas.
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Tras asegurar que en todo el país y no solo en Guanajuato se registra una crisis de violencia, el gobernador Diego Sinhue Rodríguez insistió que las mesas de seguridad son una falacia y un montaje solo para ver números.
En contraste, el gobernador de Hidalgo, Omar Fayad, destacó la necesidad de atender el llamado del primer mandatario, ya que la seguridad es un tema de corresponsabilidad.
En este contexto, los gobernadores se reunirán el próximo 13 de enero con los integrantes del gabinete federal de seguridad para hablar sobre la estrategia de combate a la delincuencia.