El Sistema Penitenciario capitalino avanzó de manera notable en el rankin nacional, ya que de 2012 a 2019 pasó del lugar número 24 al sexto en sólo siete años, lo que demuestra un avance vertiginoso en los mecanismos de reinserción para hombres y mujeres, de acuerdo con el Diagnóstico de Supervisión Penitenciaria de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
El citado estudio revela que las prisiones de la Ciudad de México comienzan a enfilarse hacia los principales peldaños de la evaluación nacional, en virtud del trabajo emprendido por la actual administración del penitenciarista, Hazael Ruiz Ortega.
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El diagnóstico se basa en el análisis diversos aspectos que corrobora un grupo de visitadores de la CNDH en temas como gobernabilidad, calidad de vida, tratamiento sicosocial, reinserción, alimentos y distribución de espacios.
La capital del país obtuvo el sexto lugar en materia penitenciaria, sólo después de Querétaro que obtuvo el primer lugar con una calificación de 8.22; Tlaxcala, con 8.07; Coahuila, con 8.3; Guanajuato, con 8.01; Aguascalientes, con 7.71 y la ciudad de México, con 7.52.
Cabe destacar que la población penitenciaria de las cinco entidades federativas que anteceden a CDMX, apenas suman de manera conjunta la población del Reclusorio Oriente, donde a la fecha existen 8 mil 500 personas privadas de la libertad.
El Diagnóstico de Supervisión Penitenciaria de CNDH fue entregado este lunes a los titulares de los 32 sistemas de los estados, cuyos resultados reflejan una mejoría en la capital.
Por ejemplo, en 2012 el complejo de reclusión capitalino se ubicó en el lugar 24 de 32; al año siguiente ocupó el sitio número 17; en 2014, el peldaño 11 y en 2015, el noveno sitio.
Los años 2016 y 2017, repitió en el lugar 11; un año después la calificación mejoró y ocupó el séptimo sitio en el rankin y en 2019, avanzó un espacio más, por lo que ahora ocupa el sexto sitio.