El Primer Tribunal Colegiado en Materia de Trabajo otorgó un amparo al Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Similares de la República Mexicana (SNTMMSSRM), mediante el cual ordena a Grupo México respetar la huelga en la mina de San Martín Sombrerete, Zacatecas, estallado el 30 de julio de 2007.
En un comunicado la organización sindical que dirige Napoleón Gómez Urrutia señaló que la resolución del órgano colegiado en el expediente 511/2019 instruye también a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) dejar sin efectos el laudo del 2 de abril de 2019 y emitir uno nuevo, en el que determine que no se puede conformar el padrón de trabajadores con derecho a voto, para desahogo de la prueba de recuento, con documentos relacionados hasta junio de 2007.
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De la misma forma indicó que el fallo establece que la copia del laudo dictado en el expediente 1791/2013, del índice de la Junta Especial Número 19 de la Federal de Conciliación y Arbitraje de 28 de enero de 2014, carece de valor probatorio.
Puntualizó que el amparo también solicita que al resolver la controversia aplique el contenido del artículo 902 de la Ley Federal del Trabajo que establece que el ejercicio del derecho de huelga suspende la tramitación de los conflictos colectivos de naturaleza económica, pendientes ante el Tribunal y la de las solicitudes que se presenten, salvo que los trabajadores manifiesten por escrito estar de acuerdo en someter el conflicto a la decisión del Tribunal.
El SNTMMSSRM recordó que la huelga de la mina de Sombrerete, en Zacatecas, del 30 de julio de 2007, fue iniciada por diversas violaciones a los derechos laborales que no fueron atendidas por la empresa filial de Grupo México, toda vez que Germán Larrea Mota Velasco acusó de ilegal el movimiento sindical.
Precisó que en su momento María Eugenia Navarrete Rodríguez, titular de JFCA avaló las actuaciones de las autoridades, entre ellas la demanda de titularidad del Contrato Colectivo de Trabajo de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), así como "la toma violenta" de las instalaciones de la mina en plena huelga, del 30 de agosto de 2012.
En este sentido apuntó que el 16 de noviembre de 2012 la demanda fue perdida por la CROC y Germán Larrea, pese a haber alterado el padrón de socios.