El Consejo de la Judicatura Federal (CJF) suspendió por seis meses a la magistrada Olga María Josefina Ojeda Arellano, titular del Sexto Tribunal Unitario Penal de Toluca, Estado de México, quien el pasado 17 de octubre ordenó reaprehender a siete elementos del Ejército mexicano implicados en la matanza de 22 personas el 30 de junio de 2014 en el municipio de Tlatlaya.
Asimismo, fue la responsable de concederle la prisión domiciliaria a Celina Oseguera, ex coordinadora de penales federales, quien fue procesada por la última fuga de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
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El CJF informó que Ojeda Arellano cambió las funciones de personal adscrito a su cargo sin justificación alguna, uso indebido del vehículo oficial, así como coaccionar a una servidora pública para certificar hechos falsos y encubrir las acciones anteriores.
El órgano colegiado reiteró que su compromiso en materia de abusos de poder es de cero tolerancia y destacó que el deber de los órganos jurisdiccionales y de todos los trabajadores, es el de impartir justicia con ética, profesionalismo y autonomía.
Mencionó que la legitimidad del Poder Judicial de la Federación está en la independencia con que se dictan las sentencias, pero también en la ética de las y los juzgadores federales.
Agregó que la justicia federal debe enaltecer estos valores y sancionar cualquier desviación a ellos en beneficio de la población.