Ante las negociaciones que existen entre Marko Cortés y Héctor Larios para lograr una candidatura de unidad a la dirigencia nacional del PAN, representando a los grupos de Ricardo Anaya, gobernadores, ex gobernadores y legisladores federales, el aspirante Manuel Gómez Morín Martínez aseveró “que es un desfiguro porque están partiendo de acuerdos cupulares que le han hecho mucho daño al blanquiazul”, por lo que él no se sumaría.
“Es un desfiguro porque están partiendo de algo que le ha hecho mucho daño al partido que son los acuerdos cupulares, y eso lo tenemos que desterrar, además son acuerdos cupulares que se dan en un ambiente donde hay corrupción, hay antidemocracia, hay sectarismo, oportunismo, hay una serie de vicios que le están haciendo mucho daño al partido”.
El nieto de uno de los fundadores del PAN aseveró que debe existir una elección interna porque es la única forma de que la militancia se manifieste y se sienta representada.
Mientras que otro de los aspirantes, Ernesto Ruffo, indicó que a él no lo han invitado a este acuerdo, pero se manifiesta en contra.
Marko Cortés, afín a Ricardo Anaya, reconoció que diversos liderazgos, con cargo y sin cargo del PAN, están en un diálogo amplio para buscar una candidatura única, para “no generar un choque de trenes interno” y se puedan consolidar como oposición.
Mientras que Héctor Larios se postularía por la secretaría general del partido, aún y cuando su candidatura cuenta con el apoyo de nueve gobernadores emanados de Acción Nacional.