El aspirante a la dirigencia nacional del PAN, Marko Cortés, presentó la primera entrega de 11 mil 56 firmas, de 15 estados, de las 28 mil que requiere para lograr la candidatura.
En la sede nacional del PAN, confió que la impugnación a la convocatoria ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación no prospere porque es similar a la que ya se ha usado para renovar a la dirigencia.
“Respeto la impugnación de cualquiera de los otros contendientes, me apego a la convocatoria y me apego a las reglas marcadas, hay que decir que esta convocatoria es similar con la que se eligió la actual dirigencia, es una convocatoria que marca que cada uno de los contendientes debe reunir el 10 por ciento de las firmas de militantes, cosa que ocurre con cualquier cargo en el partido”.
Marko Cortés aseguró que no se requieren un acuerdo de juego limpio o ampliar el plazo para recabar las firmas como lo piden sus contrincantes porque existe una Comisión Nacional Organizadora de la Elección que fue designada por mayoría y que ya emitió una convocatoria votada por unanimidad, además de que un primer bosquejo del calendario planteaba que los comicios fueran el 21 de octubre y ahora serán el 11 de noviembre, por lo que ya existen tiempos establecidos.
También, reiteró que no es la continuidad del liderazgo de Ricardo Anaya, porque va por un cambio profundo de Acción Nacional porque “es claro que se han equivocado como partido y como gobierno” y descartó tener alguna participación en los “moches” cuando fue diputado federal.
Por su parte, sus adversarios Ernesto Ruffo y José Luis Espinosa Piña afirmaron que Marko Cortés no quiso asistir a la reunión donde pedirían a la Comisión Organizadora que se eliminara el requisito de las firmas para contender por la dirigencia y donde solicitarían reglas de piso parejo.