El secretario general de la Cámara de Diputados, Mauricio Farah Gebara, informó que en septiembre será dictaminado como habitable el Edificio H que resultó afectado por el sismo del 19 septiembre de 2017, pero la obra de renivelación concluirá en 2020.
Al presentar un video y dos maquetas sobre el avance de los trabajos, puntualizó que el edificio estará en condiciones de ser ocupado y usado en septiembre, una vez que el Director Responsable de Obra (DRO) entregue el dictamen técnico.
“Lo que tenemos garantizado es que para septiembre nos estarán dando ya el dictamen de habitabilidad del inmueble; yo no tengo prisa en que esto sea el 1 de septiembre o el 10 o el 15, aquí lo importante es que podamos darle la garantía a todos de que habrá absoluta seguridad”, afirmó.
En este sentido, agregó que “tenemos que cumplir absolutamente con todas las normas, en donde se encuentre perfectamente el Edificio H, dentro de los niveles que las normas dictan”.
Cabe recordar que tras el sismo del 19 de septiembre de 2017 se detectó que dicho edificio sufrió un hundimiento y una inclinación que rebasaron los parámetros de habitabilidad establecidos por el Reglamento de Construcciones para la Ciudad de México.
Para corregir esa problemática, la Cámara de Diputados contrató los servicios de la empresa Pilotes de Control S.A., la cual comenzó a instalar, en mayo pasado, un sistema de pilotes de control bajo el Edificio H, que también se colocará en los inmuebles contiguos, A y B, a fin de reforzarlos, lo que está programado concluir en 2020.
“La instalación del sistema de pilotes de control se puede realizar con los edificios ocupados, debido a que no se pone en riesgo su estructura; por el contrario, se mejoran sus condiciones”, indica la ficha técnica de las maquetas.
También precisa que “el sistema de pilotes es el único que garantiza controlar los hundimientos diferenciales y lograr la verticalidad de los edificios en un plazo determinado y de manera permanente”.
La ficha técnica establece que en el Edifico H se colocaron 200 pilotes de control, que alcanzan una profundidad aproximada de 35 metros.