Roberto Ramírez de la Parra, director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), aseguró que “son mentiras” las versiones que se han difundido respecto a los Decretos de Reserva de Agua que señalan que el gobierno busca la privatización del vital líquido.
En conferencia de prensa, el funcionario sostuvo que esta campaña de desinformación tiene tintes político-electorales. Incluso, sin mencionar su nombre, dijo que detrás de esta estrategia se encuentra Andrés Manuel López Obrador, candidato de la coalición Juntos Haremos Historia.
“Está claramente un ataque falso con el objetivo de obtener un beneficio de carácter electoral, me parece que está muy claro el objetivo, me parece que todos ustedes ya saben quién es, ya saben quién es el que está llevando a cabo este tipo de ataques correspondientes, precisamente con el ánimo de desviar la atención para el tema electoral y obtener un beneficio de esta naturaleza”, expuso.
El director de la Conagua detalló que a través de los decretos se reservan para el cuidado del medio ambiente 169 mil 913 millones de metros cúbicos de agua, mientras que para el uso doméstico y público urbano un millón 366 mil 268 millones de metros cúbicos.
En este tenor precisó que el gobierno reservó el 80 por ciento de toda el agua disponible en las 295 cuencas a las que se refieren los decretos.
En tanto, el otro 20 por ciento estará disponible para el régimen concesional, modelo que fue establecido en nuestro país desde 1917, y el cual, desde 1992, opera como única figura de concesión a través de la Ley de Aguas Nacionales.
En este contexto resaltó que esta administración ya no otorgarán más concesiones, “ya legalmente cerramos esa llave”.
Por último Ramírez de la Parra insistió en que los decretos asegurarán el abasto del vital líquido para futuras generaciones durante los siguientes 50 años.
“El volumen de agua que amparan los diez decretos se reserva para el futuro, esto significa que ese volumen no se puede otorgar en concesión ya que servirá para preservar el medio ambiente y para poder garantizar el agua para consumo humano a millones de mexicanos que aún no nacen.
Este es el verdadero espíritu de los decretos publicados. La misión de los decretos no cambia la naturaleza del agua como un bien nacional, por lo tanto el agua no se privatiza”, reiteró.