Formado hace 6 meses, el Grupo Interdisciplinario de Feministas Mexicanas contra Vientres de Alquiler demandó respeto a la integridad del cuerpo femenino como lo establece la Constitución, incluida la restricción a la explotación del útero y la prohibición de la maternidad subrogada.
Las feministas denunciaron que desde el extranjero operan compañías que buscan localidades con “huecos legales” y mujeres empobrecidas para operar procedimientos de maternidad con vientre alquilado hasta el nacimiento de los bebés. Señalaron que en Mexico, Quintana Roo ha abierto clínicas para el nacimiento de estos bebés que fueron gestados por 9 meses en Tabasco.
Las defensoras sospechan que un millar de parejas extranjeras hayan realizado procedimientos en México a través de compañías ubicadas en naciones donde está permitida la maternidad subrogada y desde allá “opera un negocio internacional con ganancias millonarias dirigido a gente adinerada, que puede pagar a una agencia intermediaria hasta 240,000 euros. En tanto, las mujeres y gestantes, reciben solamente entre 0.9% y el 10% del pago total”. En la India, donde ya se prohibió esta práctica, este negocio llegó a redituar hasta 2 mil 300 millones de dólares al año.
FEMMVA pidió a legisladores y candidatos a la presidencia de la República impulsar la prohibición de la maternidad subrogada. Aclararon que legalizar esta práctica equivale a elevar a rango de ley la “cosificación” de las mujeres.
Apuntaron que en México esta práctica se permite en los estados de Tabasco y Sinaloa y nivel federal y aseguraron que existen varias iniciativas que pretenden regular esta práctica.