En el marco de la ceremonia en que rindió protesta como Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, y Enrique Peña dejó el cargo, no hubo insultos, por el contrario, hubo trato cordial y respetuoso hacia el ex Presidente, relató el diputado federal del Partido del Trabajo (PT), Gerardo Fernández, que encabezó la comitiva de recepción del político mexiquense.
Entrevistado en la Cámara de Diputados, Fernández Noroña aclaró, para acallar rumores y falsas publicaciones, que no habló de política con Peña Nieto, a fin de evitar malos entendidos y generar un ambiente de confrontación.
Charlaron del encuentro fortuito que tuvieron hace 10 años, en la Capilla Sixtina, en el Vaticano; y de que el mandatario saliente tuvo ganas de ir al baño antes de entrar al Salón de Plenos y cumplir el deber de entregar la Presidencia a López Obrador.
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“Y cuando llegó Peña yo creo que estaba nerviosón, y entonces preguntó por un baño ya cuando estábamos en el Lobby. Y entonces, yo tengo oído de tísico y le dije: búsquense un baño, ve”, detalló.
“Me dijo, no, no, no, sí puedo esperar. No, ve, le dije. El discurso de Andrés Manuel va a… no, no, ve”, abundó.
“Y entonces dijo ¿me dará tiempo? Y le dijeron, aquí a la vuelta hay un baño. Y entonces él: no, no, no ¿y si hay gente? Le digo, aquí arriba, aquí arriba en el primer piso hay un baño, ve. Entonces fue y bajó. Eso demuestra que somos seres humanos”, narró.
Refrendó que lo más apropiado para la ocasión fue no hablar de política, a fin de propiciar que la ceremonia del 1 de diciembre caminara bien.
El congresista dijo tener muy claro el compromiso de ayudar al Presidente López Obrador a cumplir “su sueño” de ser el mejor mandatario, por lo que no había espacio para dar mal trato al ahora ex mandatario.
Incluso, aseveró que se reconoce el valor de Peña Nieto al haber cumplido su responsabilidad de entregar la Banda Presidencial en los términos que marca la ley, y quedarse a escuchar con respeto el discurso de su sucesor.