El Departamento de Estado de los Estados Unidos, actualizó la alerta de viaje para México y clasificó al país en nivel de riesgo 2, además de modificar la calificación de riesgo para los estados de Chihuahua, Coahuila, Durango, Morelos, Nayarit y Oaxaca, en donde en algunos, pide a sus ciudadanos reconsiderar su viaje por los niveles de inseguridad.
En el caso de los Estados donde se pide a los ciudadanos norteamericanos no viajar son Colima, Guerrero, Michoacán, Sinaloa y Tamaulipas, al clasificarlos en 4. Éste es el nivel más alto de alerta debido a una mayor probabilidad de riesgos que amenacen la vida.
Durante una emergencia, el gobierno de los Estados Unidos puede tener una habilidad muy limitada de ofrecer apoyo, advierte.
Esta actualización de la alerta se realizó el 15 de noviembre de este año y sustituye a la emitida el 10 de enero del 2018 por el Departamento de Estado de los Estados Unidos.
En la nueva clasificación contempla que los estados de Chihuahua, Coahuila, Durango, Morelos y Nayarit cuentan con características para clasificarlos en nivel de alerta 3 y recomienda reconsiderar el viaje o en la medida de las posibilidades, evitar el viaje debido a riesgos serios a la seguridad.
En el caso de estas y otras entidades, el Gobierno de los Estados Unidos advierte que existen altos niveles de violencia por la actividad de organizaciones crimínales.
En el caso de Oaxaca el nivel de alerta de ubica en 2, el cual solo recomienda estar alerta a mayores riesgos a la seguridad, pero pide a sus empleados no viajar a las zonas del Itzmo, Juchitán de Zaragoza, Salina Cruz y San Blas.
En el caso de la Ciudad de México la alerta de viaje se mantiene en nivel 2, sin embargo pide a sus ciudadanos extremar precauciones debido a la delincuencia y advierte que “tanto el crimen violento como el no violento prevalecen en la Ciudad de México. Las estadísticas del gobierno mexicano indican que los incidentes criminales en la ciudad capital ocurren a una tasa significativamente mayor que en gran parte del resto de México.
Pide además prestar atención a las áreas fuera de las zonas turísticas frecuentadas, aunque los delitos menores también ocurren con frecuencia en las zonas turísticas. Barrios como Tepito y Guerrero requieren vigilancia adicional, especialmente en la noche”.