En una conversación telefónica de media hora que el futuro primer mandatario Andrés Manuel López Obrador atendió en su vehículo mientras se trasladaba al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, el presidente Donald Trump notificó que no podrá acudir a la ceremonia de cambio de poderes en México.
El próximo primero de diciembre visitará México el vicepresidente de los Estados Unidos, Mike Pence, acompañado de con una comitiva, en representación del presidente Trump, para atestiguar cuando le pongan la banda presidencial a López Obrador.
Asimismo, el presidente electo López Obrador aclaró a la opinión pública que en esta llamada, “no se trató el muro” con Trump, porque ahora “el enfoque es otro, se buscan que haya desarrollo en nuestros países para atemperar el fenómeno migratorio. Ahora hay condiciones porque ya se alcanzó el acuerdo comercial”, destacó.
“Por la vecindad que tenemos, es importante que la economía de Estados Unidos esté bien, porque mucha de nuestra relación, se quiera o no se quiera, la tenemos con Estados Unidos, y ahora hay crecimiento económico en Estados Unidos, hay empleo, están pasando por buen momento económico, entonces el que tengamos buenas relaciones ayuda a México, y que haya estabilidad financiera hace que no se debilite el peso”, consideró por otra parte López Obrador.
La llamada con Trump “fue muy buena” y, dijo López Obrador, se reconoce al mandatario de Estados Unidos que haya sido respetuoso con México en estas semanas.
El presidente electo López Obrador también informó que a finales de octubre enviará a una misión económica y comercial a Estados Unidos, bajo la tutela del próximo canciller Marcelo Ebrard Casaubón.
En el caso de su negociador ante el desaparecido TLCAN, Jesús Seade, López Obrador confirmó que doctor Seade “seguirá con el equipo porque es un especialista respetado en México y el extranjero” pero precisó que a nivel de gabinete “ya no habrán cambios”.