El titular de la Secretaría de Economía, Ildefonso Guajardo, señaló en el marco de su comparecencia ante la Cámara de Diputados, que a él los pobres no le estorban, por el contrario, son su fuente de trabajo.
Lo anterior, al reconocer que durante su presentación ante el Senado, por responder al cuestionamiento de un legislador, que probablemente se presentó en términos inadecuados.
Admitió que al responder en los mismos términos, emitió frases “no óptimas”; y aprovechó para aclarar que la dependencia a su cargo no es la de Desarrollo Social, pero trabajan en conjunto para atender las causas de la pobreza.
“Los pobres no nos estorban, son en el fondo nuestro objetivo de trabajo. No somos la Secretaría de Desarrollo Social, pero sabemos que el mejoramiento permanente de largo plazo de una sociedad, está a través de la creación de la riqueza y de utilizar mecanismos que la compartan mejor”, puntualizó.
Insistió en justificar el alza en las gasolinas, identificadas como el “gasolinazo”, al aseverar que los precios son altos, pero el subsidio que les aplicaba era más regresivo.
“Si bien se dieron ajustes importantes al precio de las gasolinas para reducir su subsidio, yo que me quedo con la tranquilidad de saber que ese subsidio era uno de los subsidios más regresivos en la historia de los subsidios mexicanos (…) Por eso para mí poder usar esos recursos generados en programas más eficientes que lleguen a los más pobres es lo más importante”, indicó.
Esto, al aseverar que al mantener controlado el precio de las gasolinas el 50% de la población más pobre apenas se beneficiaba en 10 por ciento; mientras que el provecho era para el 10 por ciento de los mexicanos con mayores ingresos.
Asimismo, afirmó que los precios de la canasta básica no se dispararon en el sexenio, como legisladores de izquierda señalaron insistentes.
Al hacer un recuento, aseveró que la tortilla solo aumentó 17% en el sexenio, cuando en administraciones anteriores se incrementó 60 por ciento. Refirió que el frijol mantuvo un precio promedio durante todo el gobierno; y en el caso del huevo, el precio bajó en un cinco por ciento, en comparación con el año 2012.
Respecto al nuevo acuerdo comercial con Estados Unidos y Canadá, señaló que las negociaciones fueron difíciles, pero se concretó. En el caso del acuerdo con la Unión Europea, tocará al gobierno del Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador firmarlo; y será tarea del Senado de la República ratificar ambos instrumentos.
En cuanto a la problemática de los aranceles impuestos por el gobierno norteamericano a productos como el acero y aluminio, el titular de Economía indicó que la idea es cerrar el gobierno con el tema resuelto.
Antes de terminar el encuentro, el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz, manifestó que el modelo económico planteado por el secretario Guajardo Villarreal es el impulsado en el saliente sexenio, pero en la siguiente administración habrá uno distinto, que tendrá presentes los resultados de lo ocurrido en los últimos seis años.