La UNAM informó que esta mañana alumnos y profesores de la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS) abrieron este plantel, el cual, expuso, ayer por la noche fue cerrado por la fuerza y de manera unilateral “por un reducido grupo de personas armadas con palos”.
En un breve comunicado la institución aseguró que dentro del grupo que tomaron las instalaciones algunas mujeres admitieron que no eran alumnas de la escuela.
“Algunas de las mujeres embozadas reconocieron no estar matriculadas en la ENTS”, afirmó la universidad.
La máxima casa de estudios del país sostuvo que por “inmensa mayoría” determinaron profesores y alumnos abrir el plantel para llevar a cabo sus actividades académicas de manera habitual.
Por su parte, las universitarias que participaron en la toma de la ENTS explicaron que la protesta que emprendieron fue motivada por los acontecimientos registrados en la Facultad de Contaduría y Administración, “donde una compañera fue violada por un estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México”.
Ademas, por el posible regreso de 11 profesores, quienes fueron suspendidos y no cesados de sus cargos, por denuncias de hostigamiento y acoso en ese plantel.
En este tenor la Comunidad de Mujeres Organizadas de la UNAM, organización que emitió el comunicado, denunció que fueron ellas las que fueron desalojadas con violencia, cuando a través de una manifestación pacífica buscaban dar visibilidad a la “violencia machista” de la que son objeto en la universidad.