La Cámara de Diputados informó que para contribuir al esclarecimiento de las anomalías en la construcción de inmuebles que se derrumbaron o bien, fueron afectados por el sismo del pasado 19 de septiembre, no se descarta llamar a rendir cuentas a las aseguradoras y las constructoras que trabajan en conjunto con el Infonavit y el Fovissste.
Lo anterior, a través del enlace que mantienen con dependencias como la Secretaría de Hacienda (SHCP), los propios organismos de seguridad social y la Secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), agregó el presidente de la Mesa Directiva, Jorge Carlos Ramírez.
“Estamos perfectamente facultados para llamar a Sedatu, para llamar a Conavi, para ofrecerles de qué manera el Congreso puede coadyuvar a supervisar lo que sucedió con estas desarrolladoras”, dijo.
“Pero más aún, si alguna de estas desarrolladoras hubiera utilizado créditos de Fovissste, Infonavit o el propio subsidio para vivienda que otorga el gobierno federal, entonces tendríamos injerencia directa sobre estas inmobiliarias y, por supuesto, se les puede llamar a cuentas”, refrendó.
El legislador del Partido Revolucionario Institucional (PRI) manifestó que el Congreso de la Unión estará atento al tema de los efectos del sismo del pasado 19 de septiembre y ejercerá sus facultades para intervenir en caso de que las aseguradoras de vivienda y otros bienes no se comporten como debieran o incumplan sus obligaciones con los beneficiarios.
Asimismo, se verificará e impulsará que las constructoras que hayan infringido las normas y por esa causa, edificios hayan quedado inservibles o bien, se hayan colapsado, asuman su responsabilidad.
Recordó que los diputados tienen la capacidad legal para llamar a esos particulares, como ocurrió en el caso del rescate bancario, cuando se conminó a las instituciones bancarias a rendir cuentas ante el Congreso.
Al respecto, el vicecoordinador de la bancada del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Zambrano, subrayó que las empresas aseguradoras e inmobiliarias tienen ganancias suficientes para asumir su responsabilidad por los inmuebles dañados y colapsados a causa de los más recientes sismos.