El coordinador del PAN en el Senado, Fernando Herrera Ávila, aseguró que el caso de la hermana y el cuñado del secretario de Desarrollo Social, Luis Enrique Miranda, quienes presuntamente vendían combustible robado, es una muestra del ADN priista del gobierno.
En entrevista, el senador por el PAN resaltó que este tipo de casos ya no les sorprenden, pues demuestran el cinismo y la protección de un gobierno, que, dijo, no ha atinado a dar respuestas a los mexicanos.
Señaló que se trata de “la marca de la casa” del tricolor, que se ha manifestado en el ejercicio de gobierno.
Fernando Herrera destacó que este caso debería ser investigado de oficio, sobre todo cuando se trata de los familiares de un funcionario que maneja recursos públicos.
Cuestionado sobre la respuesta del titular de la Sedesol, quien afirmó que no sabe ni le interesan los negocios de su hermana y su cuñado, el senador panista resaltó que es el clásico estilo del político que siente que tiene el respaldo de una autoridad superior.