México tiene suficientes herramientas para hacer frente a cualquier situación adversa que pudiera dejar la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y, de esta manera, garantizar la seguridad alimentaria a los mexicanos, sobre todo a aquellos en situación de vulnerabilidad, afirmó el subsecretario de Planeación, Educación y Desarrollo Regional de la Sedesol, Javier García Bejos.
“No hay tarea más importante para el Estado en la negociación que, con TLC y sin TLC, garantizar que los mexicanos tengan acceso a los alimentos”, expuso previo a la primera ronda de negociación que tendrá lugar en Washington, Estados Unidos, el próximo 16 de agosto.
El gobierno de la República está además comprometido para garantizar que el campo mexicano siga siendo más productivo y recupere una ruta de crecimiento importante y, al mismo tiempo, genere más empleos para detener la migración hacia el país vecino, aseveró.
El funcionario de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) consideró que el campo agrícola mexicano es cada vez más fructífero, al producir mejor que hace 10 o 20 años, y es uno de los factores que ha frenado la migración de nuestra población.
Mencionó que si bien ha habido “piquitos” en la inflación durante los últimos meses y, de repente, los indicadores de precios resultan complejos, la acción coordinada del gobierno ha ayudado a balancear el mercado alimentario.
“(Pero) en el tema de seguridad alimentaria debemos cuidar que tengamos la posibilidad de dotar de bienes comestibles suficientes a toda la sociedad de nuestro país”, argumentó García Bejos en entrevista.
Consideró que México debe buscar formar parte de una región Norteamérica altamente productiva y capaz de comercializar bienes y servicios de manera competitiva para generar desarrollo, empleo y vencer la pobreza.
La ventaja de México es que cuenta con una economía abierta y varios tratados de libre comercio firmados con otros países, tanto de América Latina como de otras partes del mundo, para generar las oportunidades de comercio bilateral, acentuó.
En su opinión, García Bejos comentó que: “Es un buen momento para voltear a ver hacia otros lados y explotar las capacidades que tenemos, hacer uso de estos tratados y buscar garantizar que nuestro país pueda tener acceso a los alimentos, con precios competitivos”, subrayó.
Insistió en que México está preparado para hacer frente a cualquiera que sea el escenario de negociación y a las nuevas reglas comerciales que sean impuestas entre México, Estados Unidos y Canadá.
“Creo que tenemos muy buenas posibilidades para que esta nueva versión o modernización del Tratado de Libre Comercio sea también una extraordinaria noticia para México, como lo fue en su inicio y como lo tiene que seguir siendo hacia adelante”, enfatizó.
Al cuestionarlo sobre los posibles riesgos para quienes menos tienen, respondió que la seguridad alimentaria siempre ha sido una prioridad para el gobierno mexicano y, ante cualquier escenario, seguirá como tal en materia de política social para abatir la carencia más dolorosa que puede tener una familia: la falta de alimento.
“Yo no veo, en ninguno de los escenarios ni en los factores externos derivados de estas negociaciones, riesgo alguno que cambie o modifique esta ruta que tenemos y (…) en materia social no hay que dar un paso atrás”, acentuó.
Por el contrario, el subsecretario de Planeación, Educación y Desarrollo Regional reiteró que es necesarios seguir fortaleciendo los programas sociales para hacerlos más efectivos en la lucha contra la pobreza.
Remarcó que el tema de la pobreza no es asunto exclusivo del Estado mexicano, sino debe convocar a empresas, comunidades, sindicatos y universidades, entre otros, porque todos deben ser partícipes “para que el desarrollo social sean una característica de una sociedad que busca vivir mejor”.