El diagnóstico psicológico de la madre de los tres menores de edad que murieron intoxicados el miércoles pasado por ingesta de fármacos, en un domicilio de la delegación Magdalena Contreras, era desequilibrio emocional grave con tendencias al suicidio que ponía en peligro la integridad física y emocional del niño y las dos gemelas, aseguró Miguel Saucedo, abogado de Leopoldo, padre de las víctimas.
Explicó a Noticias MVS que después de varios años de no encontrar el camino de la reconciliación conyugal, en 2014, inició el juicio de cambio de guardia y custodia ante el Juzgado 11 de lo familiar en la Ciudad de México.
Dos años después, la juez falló a favor de Leopoldo, una vez que se comprobó el estado de salud mental de Mireya, madre de los niños y la alienación a la que estaban sometidos, no sólo por ella, sino por los abuelos maternos.
“Ella ya presentaba una conducta muy complicada y tendiente al suicidio inclusive desde antes de tener hijos; la Juez en el procedimiento de cambio de guardia y custodia se le presenta esta prueba y ordena que le practiquen pruebas psicológicas, no nada más a Mireya, sino a los niños, a Leopoldo y también a los abuelos.
De esas pruebas se determina, son varias pruebas psicológicas, pruebas del servicio médico forense, trabajo social y todos concluyen que la actitud de los abuelos maternos y Mireya son de total alienación parental”, detalló.
El litigante indicó que la sentencia de la Juez obligaba también a los abuelos maternos a no tener contacto con las niñas y el niño, para evitarle un grado mayor de afectación emocional al que ya tenían.
Precisó que otra muestra más del grave desequilibrio emocional de la mujer, fue el hecho de que en dos ocasiones ella acusó a su cónyuge de abuso sexual por tocamientos, primero en contra de niño y años después contra una de las gemelas. En ambos casos, el Ministerio Público determinó que no existía ningún elemento de prueba.
Respecto a la carta póstuma que hallada en la habitación donde fueron encontrados muertos los tres infantes, la madre de estos y el abuelo materno, el abogado Miguel Saucedo puntualizó aspectos que deben ser investigados para descartar una posible planeación del hecho criminal.
“El padre de Mireya dejó un sobre con dinero para los gastos funerarios, dejó ordenados los testamentos, dejó ordenadas las escrituras, datos de los negocios; el padre y la madre de Mireya y ella misma, fueron copartícipes en la muerte de los niños, planearon y organizaron la muerte de los tres niños, para después suicidarse los tres, no sé si fue en un ritual religioso.
Y es que en la cama había biblias, crucifijos y en las condiciones en las que se presentaron y estaban los cuerpos, puede ser algún efecto o de ritual religioso”, afirmó.
La defensa del padre de los menores puntualizó que se está en espera de tomar la entrevista de la abuela materna, única sobreviviente, ya que los hermanos de Mireya, sólo manifestaron que desconocían el paradero de su cuñado Leopoldo.
Sin embargo, el abogado aseguró que dichas personas intentarían recoger los cuerpos de los niños sin informarle al padre de estos, por lo que dicha actitud también la consideró sospechosa. Por ello, el afectado presentó denuncia por homicidio, en contra de quien resulte responsable.
Por último, recordó que a pesar de los cinco o seis apercibimientos que Mireya recibió de la Juez entre 2016 y 2017, para entregar a las gemelas y al niño, rehusó atender la orden judicial y el pasado siete de junio, la tragedia se hizo patente.
@amarilloalarcon