La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Universidad de La Habana (UH), Cuba, reinstalarán la doble titulación en sus licenciaturas y promoverán investigaciones conjuntas, relacionadas principalmente con sus programas de posgrado, además de fortalecer el intercambio de estudiantes y académicos de los niveles de licenciatura y posgrado.
Lo anterior se desprende de un convenio firmado por el rector Enrique Graue Wiechers con su homólogo de la Universidad de La Habana, Gustavo José Cobreiro Suárez, luego de escuchar exposiciones sobre algunas líneas de investigación de interés común, como son la nanobiología celular y microscopía electrónica, endocrinología comparada y la fisiología de la reproducción de camarones, así como el cultivo primario de células cardiacas embrionarias y adultas, entre otras.
Durante la firma del convenio el rector de la UNAM subrayó la enorme cantidad de puntos de contacto que México y Cuba mantienen desde hace 500 años y en los que, sus universidades han ido de la mano y lo seguirán haciendo.
Graue destacó la importancia de reinstalar la doble titulación en las licenciaturas, pues dijo que representarán una manera concreta para profundizar la vinculación entre ambas instituciones y sus países.
Se refirió también a los posgrados y a las becas de intercambio para profesores y alumnos, a fin de que puedan efectuar estancias temporales en las dos naciones.
A su vez, el rector Cobreiro sostuvo que la firma del convenio “es un mandato de nación”, puesto que la historia de México y Cuba, así como la de sus principales universidades, no permitirían que la cooperación académica se diluyera.
El rector de la UH pidió que en el convenio se ponga particular énfasis en el impulso a los posdoctorados de egresados de la UNAM para que estudien en esta universidad cubana.
El acuerdo establece que ambas casas de estudios facilitarán la movilidad de investigadores, ya sea con fines de docencia, investigación o asesoramiento en campos de interés.
De igual manera, se contempla la organización de cursos, talleres y seminarios; el intercambio de material bibliográfico y audiovisual, además del acceso a bancos de datos e información relacionada con los proyectos conjuntos. Para cada una de estas acciones se celebrarán convenios específicos.
También señala que en el intercambio de académicos y estudiantes se observará el principio de reciprocidad en el número de aceptados por cada institución. En el caso de los alumnos, se especifica que deberán ser postulados por las instituciones y se sujetarán a las condiciones de admisión de las universidades que los reciban. El convenio tiene una vigencia de cinco años.