Algunas personas con sobrepeso pueden presentar “megarexia”, un trastorno de la imagen corporal en el que personas con obesidad “se perciben en su peso ideal, se sienten delgadas y saludables” a pesar de los kilos de más. Para superar este problema de salud, en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se les brinda tratamiento con sesiones psicológicas y apoyo nutricional.
A través de terapias de conducta, se enfrenta al paciente con el peso que tiene en comparación con otra persona con obesidad para situarlo en la realidad que se niega a sí mismo, explicó la subdirectora médica del Hospital de Psiquiatría con Medicina Familiar número 10, Dunia De Martini Romero.
Desde el punto de vista psicológico, añadió la especialista, el objetivo es hacer que la persona sea consciente de que tiene un problema con su peso corporal y se responsabilice de su estado físico y de salud para evitar mayores complicaciones ante el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas degenerativas, por lo que debe actuar para combatir su problema.
La megarexia afecta a mujeres y hombres, predomina en la mujer entre la segunda y tercera décadas de vida; no tiene causa específica, influyen factores ambientales, psicológicos y parte de la autoestima. Quienes la padecen adquieren mecanismos compensadores de negación de su realidad.
En el IMSS, como en toda institución pública, precisó De Martini Romero, se brindan terapias cortas con objetivos determinados, que van de 12 a 16 sesiones; además se complementa con consultas de nutrición.
Este trastorno de la imagen puede prevenirse desde la infancia con medidas educativas, cambiando la idea de que el niño gordito es sano, porque desde esa etapa se transmite la negación al sobrepeso y es necesario trabajar con la educación en la importancia de tener un peso ideal.