El Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República advirtió que se debe buscar un desarrollo equilibrado en el establecimiento de las Zonas Económicas Especiales, para evitar afectaciones al medio ambiente y al territorio y el desplazamiento de grupos vulnerables.
En el análisis “Seguimiento a la instrumentación de las Zonas Económicas Especiales”, el IBD recordó que a pesar de que ya existe una legislación federal en la materia, reglamento y leyes locales, aún no se ha declarado ninguna zona de este tipo en el país.
Señaló, en este sentido, que se debe vigilar la correcta aplicación de la política pública, ya que diversas organizaciones de la sociedad civil han advertido el riesgo de que no haya un desarrollo equilibrado.
No obstante, el documento resalta que varios legisladores se han pronunciado a favor de la instrumentación de dichas zonas, ya que consideran que el proyecto beneficiará a las entidades más rezagadas del país, con inversiones y generación de empleos.
En este sentido, indica que las tres primeras Zonas Económicas Especiales previstas para instalación y operación son: Lázaro Cárdenas, entre Guerrera y Michoacán; Salina Cruz, entre Oaxaca y Veracruz; y Puerto Chiapas, en Chiapas.