Dámaso López Núñez, “El Licenciado”, confesó tres preocupaciones durante su estancia en la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO): ser trasladado a un penal mexicano, que su esposa fuera encarcelada y la manipulación mediática de los hijos de Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”.
Fuentes de la Procuraduría General de la República (PGR) revelaron que durante la confesión de “El Licenciado”, quien estuvo 36 horas en la SEIDO, aseguró que tenía miedo de ser trasladado y asesinado en alguna de las cárceles del Sistema Penitenciario mexicano.
Incluso acusó a Iván y Alfredo, hijos de su compadre “El Chapo” y a quienes nombró “Los Chapitos”, que buscan borrarlo de la estructura del Cártel del Pacífico con su muerte.
Dámaso López fue subdirector del Penal de Puente Grande, Jalisco, y fue señalado de haber operado la red de servidores públicos que facilitaron la fuga de “El Chapo”.
Pidió por su esposa
De acuerdo con las fuentes consultadas, Dámaso aseguró a las autoridades de PGR que su mujer no participó en ninguna de las acciones u operaciones del Cártel del Pacífico y pidió por su libertad.
Las autoridades indagaron a la esposa y no encontró alguna conexión en el delito por delincuencia organizada, cargo que se le sigue a López Núñez.
La madrugada del martes 2 de mayo se realizó un operativo entre elementos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) y de la Secretaría de la Defensa (Sedena) para capturar a López Núñez, quien operaba desde la Ciudad de México.
Después de siete horas de estar retenido en un departamento del complejo residencial Hares, de la colonia Nueva Anzures, delegación Miguel Hidalgo, se reveló que junto a “El Licenciado” se encontraba su esposa Rocío “N”, quien también fue llevada a las instalaciones de la Seido.
“Chapitos” mediáticos y envidiosos
“El Licenciado” acusó directamente a los hijos del “Chapo” Guzmán de ser los responsables directos de la violencia que se vive en Sinaloa, además de ser una víctima de la campaña mediática que realizaron el año pasado al enviar cartas a medios de comunicación donde lo acusaban de haber perpetrado el secuestro de Iván y Alfredo en un restaurante de Puerto Vallarta, Jalisco.
En su declaración ministerial, rechazó el plagio de ambos personajes y que son “Los Chapitos” los que tratan de inculparlo en cualquier forma.
Agregó que los tres hijos de Guzmán Loera le tienen envidia a su hijo, Dámaso López Serrano, “El Mini Lic”, según por ser el heredero del Cártel del Pacífico.