Al presentar el libro conmemorativo de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), 25 aniversario, la ley al servicio de la naturaleza”, Martha Garcíarivas, en nombre de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, la Semarnat, resaltó que la Profepa ha sido “un gran impulsor de la participación social”.
Al atender las denuncias y “en su capacidad para hacer valer el derecho a un medios ambiente sano”, dijo la subsecretaria de Gestión para la Protección Ambiental de la Semarnat.
Anfitrión de la conmemoración en el Museo Soumaya, el empresario Carlos Slim enfatizó que “la protección ambiental es muy importante y la conciencia ambiental de toda la población que es cada vez más sensible a todo. Sin duda es muy importante para la calidad de vida (bajo) la idea de que las leyes estén al servicio de la naturaleza”.
De hecho, José Ignacio Campillo, exprocurador del medio ambiente al resaltar la acción de la justicia ambiental, alertó el papel de los municipios pues “ahí empiezan y terminan nuestros problemas ambientales”.
“Más de 100 enfermedades están relacionadas con las condiciones ambientales, particularmente las respiratorias, y de ahí se siguen a las cardiovasculares y la hipertensión”, subrayó Campillo.
José Sarukhán, el comisionado Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad, Conabio resaltó que proyectada hacia el futuro, la Profepa integra un perfil humanístico al resguardar “el derecho humano a un ambiente estable, limpio, adecuado, como promotor de vida adecuada”.
La Profepa, encomendada al regulamiento de los recursos naturales y para realizar auditoría ambiental, se conforma en 1992 junto con la Conabio y el Instituto Nacional de Ecología; hoy en día, empresas, ciudadanía y hasta los jueces “cuentan con un mayor conocimiento de lo que es la justicia ambiental”, dijo al cierre del encuentro el titular de la Profepa, Guillermo Haro.
El funcionario federal también destacó en el recuento de estos 25 años de la Profepa que el presupuesto es uno “de los temas a vencer” al operar “con recursos limitados y etiquetados”.
Asimismo, en una serie de proyecciones a futuro, Haro Belchez señaló que habrá un compromiso por defender especies animales y vegetales, “en especial aquellas que están al borde de la extinción, como la vaquita marina y la totoaba”.