El vicecoordinador del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Cámara de Diputados, Jorge Carlos Ramírez Marín, reviró a las críticas al Gobierno Federal por la captura del exgobernador de Veracruz, Javier Duarte y por no solicitar su deportación para que rinda cuentas en México.
Tras calificar de “chismosos” a quienes quieren conocer detalles de la detención del ex mandatario y de exagerados a quienes piden la comparecencia de los titulares de Gobernación y la Procuraduría General de la República (PGR) ante el Congreso, Ramírez Marín utilizó la frase que se le atribuyó al Presidente Enrique Peña, respecto a que a sus críticos, “no hay chile que les embone”.
“Creo que lo que les duele es que aquí sí hay detenidos, que este gobierno sí está deteniendo. Y voy a recurrir a una frase que no es mía, ‘ya ningún chile les acomoda’.
“Sí por una se quejan de uno, se quejan de la otra”, afirmó.
“¿Usted coincide con esa frase?” se le preguntó.
“Me parece muy descriptiva, por lo menos”, agregó, entre sonrisas.
“¿Si se la anota al presidente Peña Nieto?”, se le dijo, en referencia a la polémica frase atribuida al Primer Mandatario.
“No sé, yo la leí”, agregó divertido.
“Usted que ha platicado con él, ¿si se expresa así?”, se le cuestionó.
“A mí nunca me la ha contado así”, señaló entre un estallido de sonrisas propias y sonoras carcajadas de los representantes de los medios de comunicación.
El vicecoordinador del tricolor en San Lázaro afirmó que en torno al proceso legal contra Duarte, los priístas ya nada tienen que ver pues ni siquiera congenian con él y solo les resta pedir que su caso llegue hasta sus últimas consecuencias.
El tricolor nada tienen que pedirle o recomendarle a su ex militante, sino seguir la estrategia legal que mejor considere, que se defienda como le digan sus abogados y que se someta al designio de la ley.
Quien en realidad se preocupa o debería preocuparse por lo que Duarte pueda o no decir ante las autoridades, insistió, es el presidente del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador.
Afirmó que en el PRI no hay ningún temor de que al confesar, el ex gobernante destape una “cloaca”, pues lo que se demanda es saber qué actos de corrupción cometió y que se le responsabilice por ello.
En tanto, el coordinador del Partido Acción Nacional (PAN), Marko Cortés, subrayó que en torno a la detención del ex gobernante veracruzano hay cosas “raras” que es preciso aclarar, pues hasta el momento persisten dudas sobre quién le facilitó documentos falsos para ingresar a Guatemala, qué autoridades le brindaron ayuda en ese lugar, si hubo o no un pacto de impunidad para librar a su esposa y demás familiares de las investigaciones por el desvío de recursos y por qué el Ejecutivo Federal no aceptó el ofrecimiento de la deportación, y optó por la vía larga de la extradición.