El ex candidato presidencial, Diego Fernández de Cevallos, aseguró que las detenciones de Tomás Yarrington y Javier Duarte indican que México está cambiando y que la historia de ignominias está llegando a su fin.
Entrevistado en el Senado de la República, el político panista reconoció que los casos de los ex gobernadores de Tamaulipas y Veracruz representan “escándalos ominosos” que no merece nuestro país.
No obstante, afirmó que esto, junto con la Ley de Transparencia, el Sistema Nacional Anticorrupción y la reacción de la sociedad, es una señal de cambio que, aunque no será fácil, se está logrando en México.
Diego Fernández de Cevallos resaltó que para este no cambio no se requiere de un “mesías”, sino de una tarea colectiva, por lo que advirtió de los riesgos del populismo, de izquierda o de derecha, que propone a la sociedad soluciones mágicas.
Finalmente, el ex candidato presidencial destacó que, más allá de intentar dinamitar a las instituciones de nuestro país, lo que se debe buscar es fortalecerlas y limpiarlas.