CAMe operará sensores que medirán concentraciones de contaminantes

Inicia operación de sensores remotos para detectar ingreso de vehículos contaminantes al Valle de México.

Escrito en NACIONAL el

Por segundo año consecutivo operarán en la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM) sensores remotos que medirán las concentraciones de contaminantes de vehículos de carga a diésel y a gasolina.

La Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe); el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC) y el IMP operarán estos equipos sensores remotos para detectar ingreso de vehículos contaminantes al Valle de México durante la temporada de ozono (abril-junio) y supervisar que cumplan con la normatividad vigente.

Los sensores miden las concentraciones de monóxido de carbono, bióxido de carbono, hidrocarburos, óxidos de nitrógeno y partículas.

Aquellos que rebasen los límites que estable la Norma 167 de Verificación Vehicular serán retirados de la circulación por la Policía Federal y recibirán una sanción económica de 40 días de salario mínimo.  

Los operativos cubrirán todos los accesos carreteros al Valle de México y se realizarán de manera aleatoria entre marzo y junio.

Cabe señalar que además de los operativos federales en puntos de acceso al Valle de México, las autoridades de la Ciudad de México y Estado de México también realizarán operativos con sensores remotos en sus respectivas jurisdicciones para sancionar a vehículos que emitan emisiones por arriba de la norma, como transporte público de pasajeros, transporte de servicio, vehículos particulares o vehículos oficiales.

A través de esta tecnología, en el 2016 las autoridades de la Ciudad de México, del Estado de México y la Policía Federal sancionaron más de 49 mil vehículos por ser ostensiblemente contaminantes.

La técnica de medición del sensor remoto consiste en la emisión de un haz de luz infrarrojo a lo largo de un trayecto específico y a la altura del tubo de escape de los vehículos. Una serie de detectores miden la concentración de HC, CO, CO2; mientras que la medición del NOx se lleva a cabo utilizando una fuente de luz ultravioleta.

Estos sensores están perfectamente sincronizados con un equipo que registra las emisiones vehiculares y con una cámara de fotografía digital, que captura la parte trasera del vehículo para obtener las placas y datos técnicos.