Tras una hora y media de espera, los tres jóvenes sirios llegaron a México para continuar sus estudios después de que varios países les cerraron la puerta por su nacionalidad.
Debido a la guerra que se vive en su país, los estudiantes aseguraron estar muy agradecidos con los mexicanos por abrirles la frontera, así como a Adrián Meléndez, quien encabeza el Proyecto Habesha, para que la comunidad Siria llegue a nuestro país.
“Ahora estamos en México, después de que varios países cerraron su frontera, México abrió las puertas para que nosotros llegáramos, muchas gracias a México y a todos los que nos apoyaron con este proyecto”, comentó Jakdar Mohammad.
Ante poco más de 25 de personas, los jóvenes sirios terminarán sus estudios en diferentes universidades mexicanas, como parte de un convenio logrado por una institución mexicana.
“Estoy muy orgullosa de ustedes, esta es una muestra de que los sueños se pueden hacer posibles además de que la esperanza siempre se mantiene para hacer cualquier tipo de cosa, estoy muy feliz de estar aquí y les quiero agradecer a cada uno y a todos ustedes por recibirnos, los quiero”, comentó Silva Namo.
Mohammad y Namo vivían en un campo de refugiados en Domiz, Irak, por lo que ya tenían cerca de dos años de espera para recibir el visado de México en Irak.
El tercer estudiante se trata de Ahmad Aldabak, proveniente de la ciudad de Alepo, Siria, quien también deja su país por la intensa guerra civil, además de que busca una oportunidad de empleo en México al terminar sus estudios.