El gobierno de Cuernavaca impugnó ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (CSJN) la negativa del estado de Morelos de dejar las funciones de seguridad con el mando único policial que asumió desde el 2016.
De acuerdo con un comunicado, la administración de Cuauhtémoc Blanco inició la controversia constitucional el pasado 24 de febrero por la supuesta aplicación ilegal del decreto por el que el gobernador, Graco Ramírez, asumió el mando de la Policía municipal de la capital.
La razón principal es retomar el control de la seguridad de la ciudad ante la poca actividad e inoperancia de los uniformados del Mando Único impuesto, según, por el mandatario morelense.
“El Ayuntamiento de Cuernavaca adoptó esta determinación con base en el compromiso y el deber responsable de su gobierno pues, a pesar de que la sentencia que en su momento dicte la Suprema Corte de Justicia de la Nación probablemente surta sus efectos en un mandato posterior al actual, resulta necesario que futuros gobiernos municipales recobren el mando de su policía a efecto de fortalecerla y capacitarla, para que verdaderamente se pueda implementar una política pública que haga frente a los problemas de seguridad que aquejan el bienestar de los Cuernavacenses”.
“El uso arbitrario que el gobernador de Morelos ha hecho de la figura del Mando Único para dirimir una diferencia política es irresponsable y amenaza la seguridad de la gente de Cuernavaca. La controversia plantea un asunto de Estado: la subsistencia misma del municipio libre”, se lee en el documento.
El alcalde ha explicado en diferentes ocasiones que decidió interponer la controversia porque considera inconstitucional la imposición del Mando Único, también porque el estado ha sido incapaz de frenar los hechos delictivos.
Ante lo que calificó como “situación insostenible”, pidió el apoyo de la Secretaría de Gobernación para enviar a las fuerzas federales.