El alcalde de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco acudió a la Cámara de Diputados a denunciar que el gobernador del estado de Morelos, Graco Ramírez, lo quiere “aplastar” y sacarlo del municipio a través de presiones políticas y legales.
Acompañado por los integrantes de la bancada del Partido Encuentro Social (PES), el munícipe aclaró que por el momento no ha valorado sumarse a las filas de ese partido, pero en un futuro no lejano analizará unirse a un ente político, porque como figura independiente es muy complicado hacer política.
Se esperaba que durante la conferencia de prensa convocada por los diputados federales del PES, el gobernante local anunciara su filiación a ese partido, sin embargo, el pronunciamiento versó sobre el tema de la seguridad.
“Por eso voy a luchar para tener mi policía municipal, trabajar con mi policía municipal y ver la seguridad de todos los cuernavacenses. Por el momento no hay los elementos, te menciono, tenemos que trabajar tres o cuatro meses, porque no es de la noche a la mañana para poder tener una policía confiable y que la gente nos vea bien. Por eso hay que trabajar tres o cuatro meses, no es de la noche a la mañana; podemos o podremos pedir a la Policía Federal”, apuntó.
“No, por el momento no estoy con el partido, ya lo he dicho muchas veces que en algún momento tomaré una decisión de tomar un partido porque no puedes ir solo, porque si te vas como independiente te crucifican y es muy complicado y es muy difícil. Ve lo que estoy viviendo, tengo a los regidores, algunos los tengo todos en contra, por la misma ambición del gobernador, de poderme sacar”, argumentó.
Arropado por los integrantes del PES en San Lázaro, excepto el coordinador Alejandro González Murillo, que no estuvo presente en su presentación ante la prensa, Blanco Bravo insistió en que el gobernador Ramírez Garrido Abreu mantiene una persecución política en su contra, por el interés de colocar a su hijo como presidente municipal de Cuernavaca.
Cuestionado por las acusaciones que pesan en su contra, por la presunta falsificación de documentos oficiales y por supuestos desvíos de recursos públicos, el ex futbolista afirmó que esos señalamientos son “mentira”, incluyendo los hallazgos de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), que detectó irregularidades en el manejo del erario.
“Es mentira, el tesorero no se ha robado ni un peso”, afirmó tajante, tras recalcar que hasta el momento ninguna autoridad estatal o federal ha logrado comprobar los supuestos ilícitos.
Dijo que por el momento, cuenta con el apoyo de 12 presidentes municipales que se resisten a la presión política y las amenazas del gobierno de Graco Ramírez que pretende “aplastarlos”.
En su oportunidad, el vicecoordinador de Encuentro Social en San Lázaro, Hugo Eric Flores insistió en que el gobierno perredista en Morelos está actuando contra el alcalde de la capital y otros gobernantes locales que se han rehusado a cumplir sus órdenes, a fin de someterlos con medidas como la imposición del mando único policial.
Al exigir que el gobernador morelense “deje trabajar” a Blanco y otros munícipes, Flores Cervantes afirmó que el PES les ofrece una “mano amiga”, y por el momento, otorgará apoyo moral y legal al señalado, a fin de que la Secretaría de Gobernación (SEGOB) intervenga en el estado a través de una mesa de negociación con los poderes estatales.