En la Cámara de Diputados continua el proceso de entrevistas a los aspirantes a encabezar la Auditoría Superior de la Federación (ASF) para el periodo 2018-2025.
Entre las novedades del proceso, se integraron preguntas hechas por organizaciones de la sociedad civil, mismas que se colocaron en una urna, de la cual son extraídas por el presidente de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior, en San Lázaro, Luis Maldonado.
En su presentación el aspirante Eduardo Gurza, que ocupó un cargo en la Secretaría de la Función Pública (SFP) hasta abril del 2015 y participó en las investigaciones sobre la “Casa Blanca”, considero que en ese caso no hubo conflictos de interés.
Por su parte la aspirante Muna Dora Buchahin, se pronunció a favor de darle a la Auditoría Superior facultades para atraer casos graves de corrupción y “llamar” a los gobernadores de los estados a establecer mecanismos claros de rendición de cuentas sobre el uso de los recursos públicos.
Al presentarse ante los congresistas, el ex integrante del anterior Instituto Federal Electoral (IFE), Mauricio Merino, subrayó que los expedientes de la Auditoría Superior deben armarse de manera “impecable”, para que al presentarse en forma de denuncias ante las autoridades correspondientes, tengan el peso jurídico suficiente, el órgano fiscalizador gane los casos y el uso irregular del erario tenga consecuencias.
“Es muy importante fortalecer las áreas de investigación, las áreas jurídicas de la propia Auditoría Superior de la Federación, para que cada vez que presente una denuncia ya sea de carácter administrativo o de carácter penal, lo haga con absoluta convicción, con el mayor rigor técnico y jurídico y por supuesto derivado de su propia información de auditorías y que gane siempre esos casos”, apuntó Merino Huerta.
Uno de los aspirantes, de nombre Daniel Ramos Torres, fue reconvenido por el presidente de la Comisión de Vigilancia y conminado al mostrar respeto a los congresistas.
Esto, luego de que, en un tono molesto y un tanto agresivo, hiciera entrega a la diputada del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Maricela Contreras, de un libro que a su consideración, mostraba que sí tenía experiencia en el área de fiscalización.
La diputada Contreras Julián primero mostró preocupación por el gesto del aspirante, después tomó con humor la postura retadora del entrevistado.
Hacía gestos, tomó agua en repetidas ocasiones, se mesaba el cabello y cuantas veces el aspirante regañaba a los parlamentarios, la congresista de Morena de plano ya intentaba ocultar la risa colocándose la mano en la boca.