La Ley de Seguridad Interior, promulgada ayer jueves, prohíbe expresamente la intervención de las Fuerzas Armadas en manifestaciones políticas o conflictos electorales, aseveró Roberto Campa Cifrián, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación (Segob).
En entrevista radiofónica, el funcionario consideró que hay una visión imprecisa de la legislación, “en muchos casos se trata de personas que no han leído la ley o que no han querido leer la ley”.
“Por ejemplo, dicen que los militares podrán intervenir para contener manifestaciones políticas o conflictos electorales o sociales, y la ley de manera expresa prohíbe que haya una declaratoria o una intervención de las Fuerzas Armadas cuando se trata de este tipo de eventos”, recordó.
Campa Cifrián señaló que las instancias de derechos humanos siempre estarán empujando para que no haya presencia militar, sin embargo, consideró que en muchos lugares del mundo y particularmente en México, la presencia de las Fuerzas Armadas es indispensable ante el embate del crimen organizado.
“Las Fuerzas Armadas son indispensables en muchas regiones del país, indispensables por la debilidad de las instituciones civiles, pero también indispensable porque la fuerza de la delincuencia organizada en esos lugares es extraordinaria”, señaló.
Sostuvo, además, que en muchos lugares las corporaciones de policías, de pequeños municipios, incluso, estatales, son insuficientes para enfrentar este fenómeno, ya que los grupos criminales buscan penetrar a estas corporaciones, como una forma de dominar “y por eso se requiere de las Fuerzas Armadas”.
Campa Cifrián recordó que la Ley de Seguridad Interior ya está publicada, pero la decisión del Ejecutivo federal es que no habrá una declaratoria hasta que la Suprema Corte de Justicia de la Nación no resuelva los recursos que se van a presentar.
“Mientras tanto el Ejercito seguirá teniendo la presencia que tiene por decisión del Ejecutivo, esperamos que pronto se resuelva esto para que esas intervenciones sean con base en la ley”, explicó el funcionario federal.