Christian Skoog representante de la UNICEF en México advirtió que el principal riesgo que enfrentan los niños y niñas damnificados por los sismos de septiembre en México es la deserción escolar permanente, por lo que han creado un programa de seguimiento principalmente para comunidades en Morelos, Oaxaca y Chiapas.
Indicó que se ha establecido especial seguimiento a las acciones de recuperación psicológica de los menores damnificados, ya que el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha llevado programas que buscan a través del juego, que puedan superar el trauma que les dejó la devastación en sus regiones.
Sin embargo explicó que el problema más preocupante es la deserción escolar “por supuesto nos interesa mucho que haya atención a todas las comunidades pero principal palmear a las más alejadas y que no los concentremos demasiado en la Ciudad de México donde hay mucho apoyo”.
Actualmente la UNICEF ha reforzado sus acciones de apoyo a niños y niñas de Chiapas y Oaxaca, en las comunidades más alejadas y en Morelos que es una de las zonas de mayor daño.
Christian Skoog recordó que la UNICEF en alianza con la iniciativa privada y otras organizaciones, ha promovido la instalación de aulas temporales para que los menores damnificados, cuyas escuelas sufrieron daños totales o parciales por los sismos registrados en diferentes puntos de Mexico, puedan regresar lo
Más pronto posible a clases; además han entregado kits de limpieza para los pequeños y otros insumos de apoyo.