La Comisión de Fiscalización del Instituto Nacional Electoral (INE) detectó que los gastos no reportados de los partidos en los comicios del pasado 4 de junio en el rubro de representantes de casilla fue de 20.5 millones de pesos, y en el caso de los candidatos a la gubernatura coahuilense, el priista Miguel Riquelme y el panista Guillermo Anaya, rebasan los topes de gastos de campaña en 10.5 y 8.7 por ciento, respectivamente.
Los consejeros resolvieron que en Coahuila los partidos no acreditaron que el trabajo de los 2 mil 221 representantes de casilla fuera gratuito y desinteresado, por lo que ese gasto suma 2.5 millones de pesos, que implica sanciones para los partidos por 3.8 millones de pesos, y en el caso de José Guillermo Anaya Llamas se añaden 801 mil pesos a su rebase de gastos de campaña y para el priista Miguel Riquelme se suman 501 mil pesos y acumula un rebase por 2 millones 23 mil pesos.
En el Estado de México no se entregaron 23 mil 517 formatos de representante de casilla que hayan hecho su labor de forma desinteresada, por lo hubo omisiones de 15.3 millones de pesos que implicarán sanciones por 22.9 millones de pesos.
En Nayarit hubo omisión en la entrega de formatos de 4 mil 354 representantes de casilla por lo que el gasto omitido es de 2.7 millones de pesos, que implica una sanción de 4.1 millones de pesos.
Los proyectos de resolución de la Comisión de Fiscalización serán conocidos y votados por el Consejo General en su sesión del jueves 5 de octubre.