Las comisiones unidas Hacienda y Presupuesto de la Cámara de Diputados, aprobaron por mayoría del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido Verde Ecologista (PVEM), Partido Encuentro Social (PES) y Partido Nueva Alianza (Panal), en una votación cerrada, el dictamen de la Comisión de Hacienda que rechaza 27 iniciativas ciudadanas y de distintas fuerzas políticas, para reducir 50 por ciento el Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) a los combustibles.
El voto de los integrantes de la Comisión de Hacienda fue de 22 a favor y 20 en contra; los miembros de la Comisión de Presupuesto se manifestaron 23 a favor del dictamen y 16 en contra.
De modo que la votación global a favor de dar por concluido el debate del IEPS a las gasolinas, identificado coloquialmente como “gasolinazo”, fue de 45 a favor y 36 en contra.
La iniciativa presentada por ciudadanos y la diputada federal con licencia del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Ivonne Ortega, ya había sido desechada por la Comisión de Hacienda.
En el debate, los legisladores de oposición acusaron al PRI de ser insensible y de cargar el costo del “gasolinazo” y posteriores alzas en el costo de la gasolina y el diésel, a los bolsillos de los ciudadanos.
En respuesta, el PRI advirtió, a través del diputado Yerico Abramo, que fueron los panistas los que “inventaron” los gasolinazos; les pidió no engañar a los ciudadanos con que recortar el Impuesto Especial es viable.
A quienes se pronunciaron en contra, Abramo Masso los convocó a que digan de dónde saldrían más de 60 mil millones de pesos que la Federación dejaría de recaudar, si los impuestos especiales a los combustibles se redujeran a la mitad.
Bajar ese gravamen, sentenció el legislador, dejaría sin recursos a programas sociales y la reconstrucción después de los sismos.
En las rondas de votación, los legisladores de ambos bandos se desahogaron.
La oposición manifestó sus razones contra “el gasolinazo”. Quienes se pronunciaron a favor de mantener esos impuestos y rechazar las iniciativas en la materia, acusaron que de haber prosperado el recorte al IEPS, los programas sociales y la reconstrucción se podrían quedar sin recursos.