México cayó 28 posiciones en el Índice de Percepción de la Corrupción 2016, y obtuvo una calificación de 30 puntos de cien, por lo que se ubica en el lugar 123 de 176 naciones analizadas.
De acuerdo con el estudio de Transparencia Mexicana y Transparencia Internacional las reformas anticorrupción y la primera etapa de implementación del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA) no fueron suficientes para reducir el efecto de los continuos escándalos de corrupción en todo el país y frenar la caída de México en el Índice de Percepción de la Corrupción, por lo que llamó a que los cambios legales vayan de la mano con acciones sistemáticas para desmantelar las redes de corrupción que afectan a un número importante de las instituciones públicas del país.
También explicó que México se mantiene por debajo de sus principales socios y competidores económicos, pues son 40 posiciones separan a la nación de China, India y Brasil.
Las organizaciones sugieren investigar y desmantelar las redes de corrupción, creando una Fiscalía General de la República capaz, autónoma e independiente para asegurar que la política anticorrupción del país no dependa ni de la política interna ni de la política externa.
Además, piden asegurar la correcta implementación del Sistema Nacional Anticorrupción e iniciar con la creación de los Sistemas Locales Anticorrupción: 19 de las 32 entidades federativas del país aún no lo han hecho.