La opinión generalizada entre los ciudadanos apunta a que el alza en los precios de las gasolinas ha provocado aumentos en el resto de los productos y servicios básicos; es necesario discutir alternativas para hacer frente a esa situación y las medidas implementadas por el Gobierno Federal para proteger la economía familiar son insuficientes, señaló una encuesta telefónica aplicada por el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública (CESOP).
El organismo adscrito a la Cámara de Diputados indicó que conforme a una consulta telefónica aplicada a 602 personas de 18 años en adelante, entre los días 14 y el 15 de enero, la gran mayoría de los encuestados, 95 por ciento, consideró que es necesario discutir en un foro nacional, qué opciones puede tomar el Gobierno Federal para revertir el alza en los precios de los combustibles.
El ejercicio arrojó datos respecto a que entre la población hay un gran “sentimiento de molestia coraje y frustración” por el “gasolinazo”.
Indicó que el 46 por ciento de las personas creen que el incremento desmedido en los precios de los combustibles se debe al mal manejo económico; 28 por ciento lo atribuye a la reforma energética y el 14 por ciento al aumento en el precio del petróleo a nivel internacional, tal y como argumenta el Ejecutivo Federal.
El 98 por ciento de las personas entrevistadas, agregó el CESOP, dijo que el incremento en las gasolinas ha traído consigo y provocará aumentos en los precios de la canasta básica; aunado a que nueve de cada 10 personas, dijo que “ha notado” que los productos de consumo diario son más caros. Incluso, el 72 por ciento de los ciudadanos consideraron que el “gasolinazo” también generará más delincuencia.
Agregó que el 93 por ciento de las personas que respondieron la encuesta, responsabilizan al Gobierno Federal por la problemática con las gasolinas; 93 por ciento culpó al Presidente de la República; 88 por ciento a los diputados y senadores; aunado a que 87 por ciento de las personas señaló que no cree en las justificaciones planteadas por la autoridad.
Agregó que para el 83 por ciento de los consultados, con la liberalización del mercado de los combustibles los precios de la gasolina ni de la canasta básica bajarán, por el contrario, creen que seguirán en aumento.
Refirió que para el 92 por ciento de los encuestados el precio de las gasolinas es “muy caro”; el 52 por ciento se declaró dispuesto a dejar de utilizar el auto y tomar el transporte público.
Indicó que nueve de cada 10 personas reconoció no haberse sumado a las manifestaciones por el “gasolinazo”; el 95 por ciento dijo no conocer a quienes participaron en los actos de rapiña y los saqueos registrados a la par de las protestas ciudadanas; aunado a que el 48 por ciento expresó su sospecha de que los actos vandálicos fueron organizados por el Gobierno.
Para el 20 por ciento de los ciudadanos que emitieron su opinión, los robos a distintos comercios fueron cometidos por “oportunistas”; el 13 por ciento apuntó a los partidos políticos como los organizaciones; y el 76 por ciento coincidió en que esos actos delictivos se organizaron para generar miedo y pánico en la población.
Respecto a si las manifestaciones y protestas continuarán, el 84 por ciento consideró que la molestia seguirá expresándose en las calles; no obstante, el 89 por ciento indicó que las marchas y muestras de repudio contra el gasolinazo no lograrán dar marcha atrás a esa medida.
Aunado a ello, indicó el CESOP, la encuesta dejó ver que el 95 por ciento por ciento de las personas califica la situación política y social el país como “muy mala”; el 47 por ciento dice que el principal problema de los mexicanos es la corrupción y el 67 por ciento piensa que el Gobierno Federal no está haciendo nada para combatirla.
Expuso que el 90 por ciento cree que es necesario que el Gobierno Federal rinda cuentas claras sobre el uso de los recursos públicos; el 97 por ciento dijo que el aumento al salario mínimo en 2017 es insuficiente para pagar el alza en los combustibles; para el 97 por ciento las medidas de apoyo a la economía anunciadas no reducirán el impacto negativo del “gasolinazo”.
Y aunque el 75 por ciento de los consultados no sabe lo que es el “IEPS” o Impuesto Especial sobre Producción y Servicios aplicable a las gasolinas; el 85 por ciento cree que recortando el IEPS, bajarían los precios de los combustibles.