El presidente ruso, Vladímir Putin, lanzó una dura crítica contra la OTAN este lunes, acusando a la alianza militar de ser responsable directa de una creciente carrera armamentista a nivel global. Durante un discurso televisado ante graduados de escuelas y academias militares, Putin afirmó que los planes de la OTAN para aumentar su capacidad militar reflejan una estrategia que empuja al mundo hacia una nueva era de militarización intensiva.
Según el mandatario, esto implicará un aumento en los presupuestos militares de los países miembros, lo que, a su juicio, evidencia quién está detrás de la actual escalada global en materia armamentista.
"Sabemos que en la cumbre de la OTAN se planea anunciar el inicio de un programa a gran escala para continuar incrementando el potencial de la Alianza. Para su implementación aumentarán los presupuestos militares de sus países miembros (...) De esto se desprende claramente quién es el que en realidad provoca una militarización global y una carrera armamentista", expresó frente a un grupo de licenciados de escuelas y academias militares, de acuerdo con información de EFE.
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¿Por qué es clave la tríada nuclear en la estrategia de Rusia?
Vladímir Putin aprovechó para anunciar un importante reforzamiento en la tríada nuclear rusa, que incluye fuerzas estratégicas terrestres, aéreas y marítimas. Destacó que se incorporarán nuevos bombarderos Tu-160M y misiles balísticos intercontinentales RS-24 Yars, elementos que fortalecerán la capacidad disuasiva de Moscú frente a lo que considera una amenaza occidental en expansión.
La tríada nuclear ha sido históricamente el pilar de la estrategia de defensa rusa, y con este anuncio, Putin refuerza su mensaje de que Rusia no se quedará atrás ante los movimientos militares de Occidente. Además, subraya la voluntad del Kremlin de mantener su estatus como una potencia nuclear capaz de responder a cualquier desafío estratégico.
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El discurso de Vladímir Putin se da en un contexto tenso, justo antes de una importante cumbre de la OTAN, lo que añade más presión al clima geopolítico internacional. Para Moscú, el camino elegido por la OTAN no solo amenaza el equilibrio de poder, sino que obliga a Rusia a responder con medidas contundentes para proteger su soberanía y seguridad.