Este jueves Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública de México, y su esposa Cristina Pereyra, tuvieron un nuevo revés judicial, al ser sentenciados por una corte civil de Florida a pagar una multa de más de 2 mil 500 millones de dólares.
La resolución surge tras una demanda presentada por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) del gobierno mexicano por desvío de recursos, lavado de dinero y contratos irregulares.
El fallo, emitido por la jueza Lisa Walsh, señala que García Luna deberá restituir 748 millones de dólares, mientras que su esposa, considerada clave en el ocultamiento de activos, enfrenta una sanción aún mayor. Ambos fueron declarados en rebeldía al no responder a la demanda ni presentarse a las audiencias del caso.
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¿Qué podrá hacer México con esta sentencia?
La jueza Lisa Walsh autorizó al gobierno mexicano a embargar propiedades, cuentas bancarias y bienes localizados en Florida y otros territorios cooperantes. Además, la UIF busca ampliar la localización de activos ligados a la red financiera del exfuncionario y sus cómplices.
Pese al fallo, las autoridades mexicanas admiten que recuperar la totalidad de los fondos será difícil, ya que muchos activos fueron ocultos a través de fideicomisos opacos y empresas pantalla. Aún así, el caso sienta un precedente en la cooperación judicial entre México y Estados Unidos para rastrear capitales ilícitos.
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¿Qué se sabe del papel de García Luna en el crimen organizado?
Durante su juicio penal en Nueva York, testigos protegidos declararon que recibió sobornos millonarios del Cártel de Sinaloa a cambio de proteger sus operaciones. Según la BBC, incluso se le entregaron maletas con hasta 6 millones de dólares en efectivo, mientras ocupaba cargos clave en el gobierno mexicano.
Hoy, Genaro García Luna y su esposa enfrentan el costo de una doble caída: condena penal y sentencia económica, tras haber sido uno de los rostros más visibles de la “guerra contra el narco”.