Durante su visita a Emiratos Árabes Unidos, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó su intención de reunirse con su homólogo ruso, Vladímir Putin, en cuanto sea posible organizar el encuentro.
La declaración fue hecha ante periodistas, en medio de su gira diplomática por Medio Oriente, la cual lo ha llevado a sostener encuentros clave con líderes de la región del golfo Pérsico.
“Tan pronto como podamos organizarlo, y lo haremos”, aseguró Trump al ser cuestionado sobre un posible acercamiento con el presidente ruso. Aunque no ofreció una fecha específica, el mandatario adelantó que el regreso a Washington está previsto una vez concluya su agenda en Medio Oriente.
Te podría interesar
¿Qué más dijo Trump sobre su posible reunión con Putin?
Trump aprovechó su declaración para proyectar optimismo sobre el rumbo internacional: “Creo que en dos o tres semanas podemos conseguir que el mundo sea un lugar mucho, mucho más seguro”, dijo.
Atribuyó este posible avance a los esfuerzos diplomáticos actuales, aunque reconoció que aún hay situaciones “muy graves” que deben atenderse, como el conflicto en Gaza.
Te podría interesar
“Tenemos que ocuparnos de eso. Mucha gente se muere de hambre. Están pasando muchas cosas malas”, añadió. La referencia directa al deterioro humanitario en la Franja de Gaza se suma a las posturas recientes del mandatario sobre la urgencia de una salida política en Medio Oriente.
Además, anunció que hoy realizará una llamada oficial con Vladímir Putin a las 10:00 de la mañana (hora de Washington), para abordar temas como el “baño de sangre” en Ucrania y asuntos comerciales.
Posteriormente, también conversará con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, y con varios líderes de la OTAN, aunque no precisó el horario de esas conversaciones. “Esperamos que sea un día productivo”, escribió en Truth Social.
Aunque no se ha confirmado si Trump buscará intervenir directamente en el proceso de diálogo entre Moscú y Kiev, la doble llamada anunciada para hoy y sus comentarios sobre la situación global apuntan a un intento por reposicionar a Estados Unidos como un actor clave en las negociaciones internacionales.
