El caso de Anzhelika Tartánova ha conmocionado a Rusia luego de que un tribunal de Moscú ordenara prisión preventiva domiciliaria contra un hombre acusado de agredir brutalmente a la modelo, quien permanece hospitalizada en estado grave. La medida fue dictada a petición de los investigadores y establece un arresto domiciliario por un mes y 24 días mientras continúan las indagatorias.
El acusado y las lesiones graves
El imputado fue identificado como Dmitri Kuzmín, señalado de causar lesiones corporales graves intencionales a Anzhelika Tartánova, de 33 años, originaria de Krasnodar y quien recientemente se había mudado a Moscú para impulsar su carrera en el modelaje. De acuerdo con la investigación, la agresión ocurrió tras una discusión en el apartamento del acusado.
Las autoridades detallaron que Kuzmín golpeó a la modelo en la cabeza, provocándole lesiones de extrema gravedad. Los médicos diagnosticaron traumatismo craneoencefálico cerrado, contusión cerebral severa, hemorragia intracerebral e inflamación cerebral, por lo que fue sometida a una trepanación craneal de urgencia.
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Desaparición que alertó a familiares y amigos
La última vez que Anzhelika Tartánova fue vista en público fue el 28 de noviembre, cuando se encontraba acompañada de un hombre cuya identidad no fue revelada en ese momento. Su desaparición fue reportada oficialmente el 9 de diciembre, luego de que familiares y amigos notaran su ausencia en redes sociales.
Relación marcada por control y aislamiento
Una amiga cercana declaró que el presunto agresor mantenía una relación posesiva con la modelo. “Le compraba regalos lujosos, pero no le permitía comunicarse con su familia ni visitarlos”, aseguró. Este testimonio forma parte de la carpeta de investigación que busca esclarecer el contexto previo a la agresión.
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Actualmente, la salud de Anzhelika Tartánova sigue siendo delicada. Permanece en cuidados intensivos y, según los médicos, no reconoce a su hijo ni a sus padres, lo que refleja la gravedad del daño neurológico.
La Fiscalía abrió una causa penal contra Kuzmín, quien podría enfrentar hasta ocho años de prisión si se confirma su responsabilidad. El caso de Anzhelika Tartánova ha reavivado el debate en Rusia sobre la violencia contra las mujeres y la respuesta judicial ante agresiones graves.
Con información de RT.
